Algunas empresas, con el fin de ahorrar, deciden dejar de invertir en la prevención de riesgos laborales. Sin embargo, esto puede suponer un ahorro siempre y cuando no se produzca ningún accidente en la empresa. Dicho de otra forma, puede ser un ahorro a corto plazo, pero no a largo plazo.
Es necesario saber que invertir en la prevención de riesgos laborales no es cuestión de probabilidades, ya que hay una larga lista de factores en los que se puede demostrar cómo a la larga incrementa el rendimiento económico.
Esta lista se puede resumir en menor absentismo en el trabajo, menor número de accidentes, menor tiempo perdido por el trabajador accidentado, menos interferencias en la producción, personal mejor motivado y orientado a un trabajo efectivo o evitar sanciones y multas, entre otros factores.
La prevención de riesgos laborales no debe considerarse como una parte de la empresa que se puede obviar si se quieren reducir costes, se trata de uno de los componentes más importantes de las empresas y hay que darle la relevancia que merece.