El pasado viernes UGT lanzaba la campaña ‘Ni una muerte más’, en la que que pretende concienciar tanto a los trabajadores como a las empresas de la siniestralidad laboral. La secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT, Ana García de la Torre, alabó la reducción de los accidentes laborales mortales hasta febrero, aunque mantuvo que estos datos debían tratarse con cautela ya que son provisionales y, asimismo, matizó que a pesar de ello, los accidentes laborales han aumentado.
Tal y como ha especificado la propia secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente, ‘cada día 2 trabajadores fallecen como consecuencia de su trabajo, hay 3.652 personas que sufren un accidente laboral en España y durante el año 2018 se produjeron 1.333.002 accidentes de trabajo, de los cuales 652 fueron mortales’, algo que sin duda pone sobre la mesa uno de los temas que más debería de tenerse en cuenta.
Asimismo, Ana García de la Torre no ha querido dejar pasar la oportunidad para decir que ‘el miedo a perder el puesto de trabajo produce que los accidentes sin baja sigan siendo más numerosos que los que sí provocan la baja. Durante 2018 se notificaron 730.686 accidentes sin baja, lo que supone el 55% del total de los accidentes de trabajo. Es evidente que las Mutuas han endurecido sus criterios para conceder bajas laborales y necesitamos que se forme adecuadamente a los facultativos del Sistema Nacional de Salud para detectar las enfermedades profesionales y derivarlas a las mutuas’.
Hablando de la precariedad laboral, ha querido destacar que ‘la precariedad laboral mata. La tasa de temporalidad está por encima del 26%, agravada claramente por la reforma laboral. Paralelamente, otra de las características de los empleos creados es la parcialidad que se ha convertido en una importante fuente de precariedad laboral. Uno de cada tres empleos creados desde 2011 ha sido a tiempo parcial’.
Por eso mismo, y teniendo como meta el eslogan de la campaña ‘Ni una muerte más’, Ana García de la Torre ha propuesto ‘una Inspección de Trabajo y Seguridad Social con recursos suficientes para cumplir eficazmente con la función de vigilancia y control de la normativa sobre prevención de riesgos laborales; reforzar el Instituto de la Seguridad y Salud en el Trabajo para que pueda realizar el necesario análisis y estudio de las condiciones de seguridad y salud en el trabajo, así como la promoción y mejora de las mismas; y que el nuevo Gobierno y Parlamento que surja de las elecciones generales del 28 de Abril deroguen las reformas laborales y avancen en un nuevo marco legal que combata la precariedad laboral y que acabe con el deterioro de condiciones de trabajo asociadas al incremento de los daños a la salud’.
